El pescado es un alimento muy rico en proteínas y algunas vitaminas y minerales. Sin embargo, lo que convierte al pescado en un alimento especial es su contenido graso. La grasas de los pescados se encuentran entre las más insaturadas del mundo animal, llegando a tener una proporción de omega 3 cercana al 50%.
Es precisamente su contenido en grasa el que da lugar a la principal división entre los diferentes peces. Así, se suele hablar de pescados en blancos, semigrasos y azules:
Pescados blancos: Menos del 2% de grasa
Pescados semigrasos: Contenido en grasa entre el 2% y el 7%
Pescados grasos o azules: Más del 7% de grasa